El sexo sin amor es la masturbación del alma

Por un instante su mundo se detuvo, pudo abrir los ojos y contemplar el caos en el que estaba convertido; admiró ese ente escarlata que murmuraba en su pecho seguido de un espasmo frío que le recorría la espalda, la mirada hacia el infinito, mientras las manos sudaban.
Nunca es demasiado tarde para entregar el corazón, repetía en silencio mientras caminaba en una tarde purpura, la soledad le tocaba el hombro mientras la nostalgia lo tomaba de la mano; pensando en que al fin y al cabo, un corazón lastimado y echo pedazos, sigue siendo un corazón.

"El corazón no debe endurecerse nunca, por más que lo maltraten y lo lastimen, el corazón, siempre tiene que ser eso; corazón"

Contando los pasos mientras pasaba una mano por su pelo, con la mirada hacia todos lados, una mirada que parecía fija, pero que en realidad no veía nada, el frío que golpeaba su cara y sus manos era solo parte del frio que venia desde adentro ¿Esta bien querer con la intensidad de un sol? -Si- se respondía a si mismo, mientras escuchaba de fondo el ruido que le componía el mundo, prefiero darlo todo y no recibir nada, a no dar nada y perderlo todo, pensaba en su interior, ¿es tan difícil querer y ser querido? ¿cuidar y ser cuidado? entregar el corazón y que alguien lo cuide como algo valioso, el ruido seguía invadiendo el ambiente, pero no lograba robar su atención, camino sobre la colina para ver como el sol casi le decía adiós, el sabor de su boca era distinto al de otros días, 3 siglos no fueron suficientes, el mundo es hostil y cruel con quien solo quiere querer, hay tormentas de "peros" que siempre van a estar ahí.

- ¿Tal vez deberías cambiar quien eres? ¿Por que no te conviertes en alguien frio? 
- Quiero pensar que mi corazón es eterno, aunque yo un día deje de serlo ¿sabes?

Hay juegos que no deberían jugarse, hay montañas que tienen las respuestas, pero ¿Y si esas respuestas cambian quien eres? ¿Estarías dispuesto a pisar una flor por no caer al lodo?- No

A veces la dimensión no es la correcta, es inútil querer medir la distancia en kilómetros. Pensó en reescribir una frase que había escrito por primera vez hacia ya 19 años "La proximidad emocional que causan algunas palabras" pensó en dejar de sentir, pero decidió no hacerlo, volteo a ver a su alrededor, y miro como la gente vivía sin existir, siendo pero sin ser, se pregunto como les resultaba tan fácil sentir menos y dosificar el amor, siguió caminando con el sol ya oculto, ¿Acaso esta mal entregarlo todo cuando lo sientes? El tiempo no significa nada cuando quieres entregar el corazón, siguió caminando, con las manos en las bolsas de su chamarra negra, sus tenis que hoy lucen mas sucios que de costumbre, su cabello despeinado y una sonrisa muy discreta; decidió seguir entregándolo todo, tal vez un día alguien solo quiera querer, tal vez un día el amor que tenemos para dar en la vida se va a terminar, decidió seguir queriendo... 



Descontón Cholo

“Únicamente cuando se pierde todo somos libres para actuar.”

Es un viernes por la noche, estoy parado frente al clóset eligiendo que ropa utilizar, elijo un levis classic black que todavía tiene las etiquetas puestas, una camiseta negra, mi chamarra de piel y mis chelsea's.
Me meto bajo la regadera mientras de fondo suena "How soon is now" salgo de bañarme y mientras camino por la sala solo en boxers, me imagino animado con ganas de salir a la calle, sentir el frio de diciembre y caminar un poco.

Hoy mi plan es asistir a una cena que organizaron en la oficina, así que estoy relajado, termino de ponerme mi ropa, mientras me peino me retumba en el pecho el bajo de "Atomic" eso me recuerda Trainspotting y cantando "Tonight make it right"salgo de mi departamento, la noche es fría; pienso, mientras saco de mi bolsa una caja de Montanas blue y enciendo uno, me paso una mano por el pelo y empiezo a caminar para cruzar la avenida, sigo por el boulevard hasta llegar a una glorieta que siempre me recuerda una escena de "The dreamers". Decido tomar un taxi justo antes de terminar mi cigarro, el taxista me recibe con un "buenas noches" seguido de una platica sobre el frio de la noche

-¿Le molesta la música joven?
-No, no se preocupe, esa canción hasta me gusta

En la radio suena "Añorando tus besos" de Los Cadetes de Linares, el taxi sigue sobre la vía rápida, en 15 minutos estoy afuera del restaurant/salon, me recibe una hostess que probablemente jugaba con muñecas, cuando yo ya estaba recorriendome las esquinas montado en una tabla element, entro al lugar y apenas me siento el mesero me pregunta si quiero un whisky o una cerveza, pido una newcastle y veo como empiezan a llegar todos, es muy temprano asi que el salon esta practicamente solo, enciendo un cigarro mientras me muevo de un lado a otro en mi silla, escuchando a Sussie 4 con "On Time" de pronto ya el salón esta lleno, para ese momento el mesero solo sigue trayéndome cervezas sin que yo se las pida, la noche va avanzando entre anécdotas de trabajo, risas, quejas de quien trabaja mas o quien trabaja menos, yo solo sigo la platica, me rio y a veces solo asiento con la cabeza, la noche sigue, después de cenar y bailar, alguien se acerca a mi oído y me dice que vayamos a la barra.
El barman me dice que la newcastle se termino, sirveme un whisky le digo pensando en un chiste que prefiero no mencionar, la conversación se torna muy interesante para este punto, o tal vez eso me parece después de todas las cervezas que me he tomado, seguimos hablando sobre las películas que hemos visto una y otra vez, por momentos solo reímos o nos miramos sin decir nada, sigo tomando whisky, ya es de madrugada asi que decidimos salir del salón los pocos aferrados que decidimos quedarnos hasta el final, salgo del salon aun con un vaso con whisky en mi mano, saco mi caja de Montana's y prendo un cigarro mientras el frio de la noche que se es intenso, apenas se siente en mi cara, alguien me dice vamonos y de repente ya estoy sentando dentro de un carro que huele a vainilla mezclado con Carolina Herrera, avanzamos, la ciudad esta solitaria y cubierta por una capa ligera de neblina, se que hace frio aunque no lo siento.
Llegamos a un bar donde hay música new wave y las paredes son completamente rojas, es un lugar muy familiar para mi, pues se ahora que estoy muy cerca de mi casa, seguimos entre platicas y cerveza, la conversación de pierde entre sonidos de synths y carcajadas que probablemente sean por algo que en otra circunstancias no nos causaría risa, salimos del bar
un par de horas después y me parece una buena idea irme caminando hasta mi depa, pasan algunos minutos discutiendo entre si me debo ir caminando o que si debería tomar un taxi, me tomo de un trago lo ultimo de la cerveza que tengo en mi mano y despidiéndome solo con la mano empiezo a caminar, camino por una calle solitaria hasta llegar a un boulevard, me detengo a prender otro cigarro mientras sigo caminando me siento confiado, pues todo el alcohol que llevo encima me hace estar en calma, camino hasta salir por completo del área bonita donde estaba el bar, hasta llegar a un puente que cruza una vía rápida, subo mientras busco la caja de Montanas en la bolsa interior de mi chamarra, es una noche solitaria y yo no se que hora es, sigo subiendo por el puente atravesando la obscuridad y mirando la vista que me ofrece la ciudad, hoy no pienso que es un lugar peligroso sobre todo para caminar por la noche, no pienso en los cientos de tecatos que viven abajo en el rio, solo voy caminando mientras existo y viceversa.

Por un momento pienso en como esta ciudad tiene estos contrastes, hace unos minutos caminaba por una zona donde parece que el polvo y la grasa que emana el resto de la ciudad no existiera, 5 minutos después estoy sobre un puente que cruza un rio, donde la población se mezcla entre tecatos, homeless, locos, vagos, deportados y toda una fauna de personajes que alguien no quisiera encontrarse, sigo pensando en eso y trato de mantenerme alerta, sigo caminando por un costado del puente mientras escucho pasar algún carro a velocidad alta y lo veo perderse en la noche para después seguir escuchando el silencio.

Hay algo que pasa con este puente, funciona, existe y coexiste, es como una frontera invisible y a veces no tanto, como una zona cero, de un lado esta la zona financiera y las tiendas exclusivas y al otro lado los departamentos exclusivos y torres de penthouses, mientras en el medio de todo eso esta el puente, ese mismo que he mencionado en otras ocasiones, me recuerda a una película de David Lynch, pero también a una escena de Mad Max, de la versión ochentera con toda esa mugre y esos colores ocre que permean la vista durante el dia, esa obscuridad mas densa que cualquier noche,la  que se percibe en las miradas de las personas que por decisión propia o por alguna desgracia terminaron malviviendo en ese hoyo que funciona como un oasis, como un respiro para todos los outcasts y creeps que se consumen en este monstruo.

De pronto una camioneta pasa y frena unos metros adelante, se mantiene parada un par de segundos

- Ya valió verga

No se, si lo pensé o lo dije en voz alta, la camioneta sigue detenida y yo camino mas lento, antes de poder cruzar hacia el otro lado del puente, se echa de reversa, es una camioneta de 4 puertas color obscuro, de un modelo no muy reciente, se abren las puertas traseras y veo bajar rápidamente pero sin correr a dos vatos, uno es de mi tamaño y el otro un poco mas pequeño, pero noto por sus caras que de edad tienen unos años menos que yo, me muevo unos pasos hacia mi lado izquierdo dándome media vuelta, uno de ellos intenta agarrarme del cuello, lo tomo de los brazos mientras el otro me patea en la pierna, de repente estamos forcejeando, siento un golpe en el lado derecho de mi cabeza sin mucha fuerza o al menos eso siento por la adrenalina del momento, golpeo al mas bajo y cae al suelo mientras el otro me sigue jalando de la chamarra, caigo al suelo de rodillas y cuando intento levantarme siento una patada en las costillas, me repongo, para ese momento mi lógica no es cruzar al otro lado del puente o regresar hacia abajo, golpeo de nuevo al que me dio la patada y por un momento el otro desaparece o al menos deja de agarrarme y darme golpes, todo pasa en cuestión de segundos pero para mi es algo eterno, de pronto me agarran entre los dos mientras dicen algo que no alcanzo a entender, me agarran de los brazos y me ponen contra el borde del puente, en ese momento solo pienso en que me van a empujar hacia abajo, si eso pasara seria casi imposible que alguien  me encontrara, todo eso pasa por mi mente en unos cuantos segundos,intento soltarme mientras uno deja de agarrarme intentando quitarme una pulsera, pensando que probablemente era un reloj o una esclava, una pulsera que había sido el regalo de mi hermana un año antes, suelto un golpe y logro zafarme, me quito mi cinto el cual tiene una hebilla enorme que emula la etiqueta de Levi´s y golpeo a uno en la cara, siento como la hebilla choca contra la piel, seguido de un grito de dolor, en este punto veo que alguien mas bajo de la camioneta, intenta acercarse pero lo alejo con la hebilla, de pronto corren a la camioneta, yo voy detrás de ellos y estrello la hebilla contra la ventanilla trasera, luego contra el vidrio del copiloto, la camioneta se echa en reversa intentando que yo me aleje, pero en ese punto yo estoy mas enojado que asustado, finalmente estrello la hebilla contra el vidrio trasero, la camioneta arranca, camino hacia atrás rápidamente, aun tengo ese rush de adrenalina, como si todavía estuvieran encima de mi golpeándome, me reviso el cuerpo, buscando alguna herida, me paso la mano por la cara, aunque la noche es obscura, veo todo muy claro, no tengo sangre y al parecer no hay heridas; noto que mi chamarra esta rota de una manga, y mi pantalón esta casi abierto de la rodilla derecha, intento tomar un respiro y recuperar el aliento, reviso mis cosas, no tengo mi cartera, tampoco mi celular, ahora entiendo por que me dejaron y trataron de salir corriendo tan repentinamente, camino hasta bajar el puente ahora siento el frio y empieza a dolerme la cabeza, no hay nadie alrededor, solo la noche obscura, camino rápidamente, hasta llegar a mi depa, afortunadamente conservo las llaves, me siento en el sillón sin pensar en nada, solo doy gracias, me veo frente al espejo, la borrachera que llevaba encima desapareció y ahora estoy adolorido, mi cabeza da vueltas y siento nauseas, mi mano derecha esta lastimada, mis nudillos parecen haber golpeado un pedazo de cemento, y veo que hay manchas de sangre sobre mi camisa y en la hebilla de mi cinto, afortunadamente no es mía, pienso mientras me quito la ropa y toco el piso del baño completamente helado con mis pies descalzos, aviento un poco de agua sobre mi cara y me lavo las manos, me acuesto pensando en lo cerca que estuve de caer por ese puente, tal vez nadie me hubiera encontrado nunca, tal vez si ¿hubiera muerto? o no, hasta que quedo profundamente dormido.

Epilogo:Al otro día desperté pensando, en como todos esos años de recorrer las esquinas tal vez hicieron la diferencia la noche anterior, pensé en que tal vez había sido muy pendejo pelear por defender unas cuantas cosas materiales, pero estaba feliz por que aun tenia la pulsera que me había regalado mi hermana, solo perdí el celular y unos cuantos pesos que gastaron al usar mi tarjeta antes de que se bloqueara, FIN.




El amor es sabio, el odio es un ignorante

"Un día despertaras en los ojos de alguien, vivirás en su sonrisa y morirás en sus brazos mientras le entregas tu corazón"

Un día sin esperarlo encontré una flor hermosa que me cautivo y supe desde ese momento que quería tener esa flor en mi vida, que me daba luz y que me arrancaba sonrisas con solo verla, que era lo primero que pensaba al despertar y lo ultimo que pensaba antes de dormir. Sin embargo con el paso del tiempo esa flor empezó a a marchitarse en mis manos sin que yo me diera cuenta de lo que pasaba, me dolía ver como aquella flor que yo tanto quería empezaba a cambiar su color  ! tengo que hacer algo ! dije, mientras me ponía una mano en el corazón, pero al mismo tiempo un demonio me tomaba por el cuello y me nublaba la visión. De pronto escuche una voz -soy tu corazón-  me dijo, mientras me mostraba una imagen de aquella flor, de mi flor; donde lucia radiante, donde se veía llena de vida, - mira a tu flor- me dijo mi corazón una y otra vez. Mientras todo esto sucedía el demonio seguía jalándome 

-No pierdas de vista a tu flor- me decía mi corazón, de pronto sentí que me hundía en un mar de plomo y el corazón apago su voz.
Pensé que todo estaba perdido, esa flor caerá conmigo en este mar de plomo y jamas podre salvarla me repetía una y otra vez a mi mismo -No temas- me dijo esa voz nuevamente, puedes salvar a tu flor. Entonces empece a llorar y seguí llorando como si no existiera un mañana, mientras veía como caían todas mis lagrimas, como hacían que el plomo de ese mar donde estaba hundida mi flor empezara a disiparse, hasta que termine de llorar y todas mis lagrimas limpiaron el plomo que estaba cubriéndola, entonces; ahí estaba mi hermosa flor; de nuevo, brillando y sonriéndome, haciéndome feliz de nuevo.